Blogia
Racho!

No soy tan mal escritor

Bien, hoy buscando mi retícula para conocer mis calificaciones y las materias que llevo cursadas, me encontré con un escrito que hice hace tiempo y que me gustó. Algunos ya lo leyeron, otros no. Así que decidí publicarlo. Yo creo que no es tan malo, y quizá algún día llegue a formar parte de alguna novela que realice.

-¿Cómo estás?- susurró a mi oido al momento de colocarse a mis espaldas y rodearme con sus brazos.
Me gustaba que hiciera eso, más nunca se lo dije. Sentir su calor cubriendo mi cuerpo, me daba una seguridad que no había experimentado en otras ocasiones. Ni siquiera con Tomás, al que creí el amor de mi vida. Realmente no sé cuál fue el motivo por el que decidió irse de mi lado. Pero eso era el pasado, mi presente estaba ahí, en la cocina. Me volteé para mirarlo y su desnudez me dejó atónito. Admito que no era la primera vez que lo veía así. De hecho, presumo conocer cada una de las pecas, cicatrices y lunares que el tiempo y el sol han dejado sobre su tez dorada. Sin embargo, mis sentidos sucumbían ante la belleza y perfección de su ser.
-Ve a vestirte- le ordené cariñoso.
-¡Arquitecto Legorreta!- exclamó insatisfecho, mientras retrocedía dos pasos -¿No le gusta lo que ve?
-Aún no soy arquitecto- le reprendí ignorando su pregunta.
-Pero un día lo serás, y me sentiré muy orgulloso.
Fue ahí cuando lentamente se desplazó hacia mi, deteniéndome a escasos centímetros. Acarició mi pecho al momento de recorrer mi cuello con sus labios húmedos y tibios. Tomó mi mano y la posó en su miembro ya erecto. Lo masturbé por unos minutos, hasta qe decidí bajar un poco más para tomar sus firmes y bien formados testículos.
-Te amo- me dijo, y nos fundimos en un largo beso.


Espero no sean tan persignados! Racho!

0 comentarios